Estimadxs lectorxs del blog de LaFarmacia.es,
soy Joan Marc Lloveras CEO de LaFarmacia.es, humilde Telecos en el complejo mundo farmacéutico.
He decidido parar un momento del ritmo frenético que llevamos desde hace semanas, para escribir estas líneas después de haber leído las declaraciones de Fernando Simón. Al leer esas palabras uno siente mucha pena y enfado, realmente no quiero valorar mucho más cómo nuestro gobierno nos ve en esta crisis, sobre todo porque varios colegios de farmacia y farmacias ya han replicado muy bien la vergüenza que es que una persona en la posición de Fernando Simón diga lo que ha dicho. Pero en cambio siento el deber de usar el altavoz de nuestro blog para rendir un homenaje al gremio farmacéutico.
Quiero dar mi apoyo y gratitud a todas esas personas que hacen posible que todos los españoles tengan acceso a medicamentos, gracias a los mayoristas que van a toda máquina y que hacen lo posible por abastecernos lo mejor posible, gracias a las personas que con su furgoneta cada día mañana y tarde nos traen los medicamentos sin rechistar, gracias a los laboratorios que nos han hecho llegar su apoyo, gracias a los delegados que desde sus casas y con sus hijos de fondo trabajan sin parar para tramitar nuestras comandas, gracias al personal informático que ahora más que nunca responden eficazmente a nuestras averías para poder seguir trabajando, gracias a los colegios oficiales que hacéis que la farmacia se sienta con voz y representada, gracias a nuestra competencia online por ser tan inspiradores, por poner el nivel de excelencia tan alto y por hacer un gran trabajo, y sobretodo gracias a las más de 22.000 farmacias españolas que tejen la red de farmacias comunitarias más grande de Europa.
Mi madre y mi pareja son farmacéuticas, he trabajado años codo con codo con ellas en los que aprendí los valores de la profesión, con lo que puedo decir que conozco bien la función que se desempeña en el día a día. A la farmacia históricamente se la maltrata, cambiando legislaciones a última hora, pagándole mal y tarde, no reconociendo su valor en la sociedad como los únicos profesionales del medicamento que existen, y en cambio si uno se fija, en el día a día las farmacias perseveran y levantan sus persianas para atender a la gente. Para mí dice mucho del colectivo.
Desde aquí os quiero dar las gracias y apoyo a todxs lxs profesionales que cada día estáis atendiendo a personas en una farmacia, escuchando, explicando y enseñando, dando un servicio tan fundamental como es el de dispensar medicamentos para todxs.
Como muchos otros profesionales en estos momentos tan complicados (no sólo sanitario), las farmacias están en primera línea y no precisamente facturando (no hay para vender mascarillas, apenas hay guantes, alcohol, gel hidroalcohólico etc) sino dando apoyo a las personas que entran con miedo y ansiedad. Está claro que no es tan glamuroso como para ser portadas de medios de comunicación, pero muchas personas de las que acuden a la farmacia estos días tienen la moral baja, la situación es muy difícil, pero ahí está el farmacéutico o el auxiliar transmitiendo tranquilidad, calma y explicando una y otra vez para que nadie lo olvide las pautas básicas de higiene para prevenir el contagio y sobre todo para decir: "Esto lo superamos".
Mi más sincera gratitud a esas mujeres y hombres que cada día dan un servicio de un valor incalculable en las farmacias de todo el país y que se juegan su salud, aún sabiendo que su labor no está valorada por su Gobierno como bien claro lo ha dejado Fernando Simón.
Para acabar me gustaría aprovechar mi paso por el blog de LaFarmacia.es, para destacar que aunque el Estado no cuenta con las farmacias en esta crisis (perdonad, el Estado cuenta con que la farmacia seguirá abriendo cada día sin quejarse caiga lo que le caiga), el tamaño y la capilaridad de nuestra red de farmacias permite llegar a un elevadísimo número de población. Esta característica hace de la farmacia el aliado ideal para poder hacer la prueba de detección del COVID-19 a todos los ciudadanos (ya sabéis, como la OMS indica, las directrices para todos los países es "pruebas pruebas y más pruebas"). ¿Qué servicios presenciales en nuestro país y con profesionales altamente formados llegan a pueblos de menos de 500 habitantes? Dejadme que os conteste: sólo la farmacia. Usemos de una vez este gran activo para el bien de nuestra sociedad, usemos ya en esta grave crisis a las farmacias y reconozcamos toda su capacidad.
Gracias por leernos y cuidaros mucho