En pasado post hablamos sobre lo que era la alergia y por qué nos causaba esos síntomas tan molestos. Ahora vamos a explicar los diferentes tratamientos que existen para tratar la alergia:
Los antihistamínicos son medicamentos que bloquean la acción de la histamina (uno de los causantes de los síntomas de la alergia). Entre sus efectos están la reducción del picor nasal u ocular, la disminución de la inflamación de mucosas (que hacen que nos lloren los ojos o nos gotee la nariz) y el alivio de síntomas en la piel como el picor, la rojez o irritación. Encontramos antihistamínicos en distintas presentaciones como colirios, cremas, comprimidos o sprays. Pueden venir solos o acompañados de otros fármacos, y los hay con receta médica o sin receta médica.
Los descongestivos son un grupo de fármacos que disminuyen el calibre de las arterias haciendo que llegue menos sangre a la zona que tratamos y evitando así que lleguen los mediadores de la alergia (la histamina y sus amigos que viajan por la sangre). Sus efectos son rápidos, reduce la sensación de congestión, la rojez, el picor y la inflamación. Existen descongestivos en colirio, comprimidos o sprays, solos o combinados con otros fármacos y con receta médica o sin receta médica.
Los corticoides son un grupo de medicamentos que bloquean las reacciones de inflamación desde su origen. Evitan la rojez, el picor, la hinchazón y el dolor (también se usan para otras aplicaciones). A nivel sistémico son complicados y por eso no existe ningún preparado de venta sin receta. A nivel local existen cremas sin receta médica que calman las urticarias y el picor e irritación de picaduras u otros trastornos.