La insuficiencia venosa leve o, como se conoce más comunmente, síndrome de piernas cansadas, es una afección de la circulación sanguínea en la que la sangre tiene problemas para volver desde las extremidades (sobre todo desde las piernas pero también a veces desde las manos) al corazón. Algunos de los síntomas con los que se manifiesta son:
- Pesadez o sensación de cansancio en las piernas
- Hormigueo
- Picor
- Inflamación o hinchazón
- Varices
El síndrome de piernas cansadas puede ocurrir por diversos motivos como la edad o la genética, aunque también puede verse empeorado por una dieta poco saludable, el sobrepeso o la obesidad, la vida sedentaria o el estilo de vida (personas que estén mucho tiempo sentadas o de pie)
Sean cuales sean los motivos por los que aparece, aquí te dejamos unos cuantos consejos que pueden ayudarte a disminuir el malestar de tus piernas:
- Bebe mucha agua. Evita el alcohol y el tabaco, que empeoran la circulación.
- Duerme con las piernas ligeramente levantadas
- Evita el consumo de sal y vigila tu alimentación para hacerla más saludable y evitar el sobrepeso
- Haz ejercicio regularmente
- Evita la ropa ajustada
- No permanezcas demasiado tiempo en la misma postura. Si tu trabajo te obliga a estar de pie o sentad@ muchas horas procura hacer descansos de postura de vez en cuando. Levántate y camina unos minutos cada hora para activar tu circulación
- Cuando estés en una misma postura mucho tiempo (ya sea de pie o sentad@) mueve la articulación de tus tobillos; de esta manera favoreces el retorno de sangre al corazón (retorno venoso) y alivias la pesadez de piernas. Hay diferentes tipos de ejercicios de tobillos que pueden ayudarte a favorecer el retorno venoso, el que he escrito es sólo un ejemplo.
- Moja tus piernas con agua fría.
- Hazte masajes en las piernas que favorezcan la circulación o que eviten la retención de líquidos
¡Gracias por leernos!
