La vuelta al cole ya está aquí, y muchos de vosotros habéis vuelto también de las vacaciones (lo siento, no quiero meter el dedo en la herida) lo que significa que volvemos a poner a trabajar neuronas y músculos y muchos de nosotros, también los ojos que han de volver a superar jornadas enteras de exposición a las ondas del ordenador. En el blog de hoy hemos pensado en esos pequeños olvidados que trabajan sin descanso para nosotros, nuestros ojos, que día a día se enfrentan a horas de lectura y visionado a través de pantallas y qué muchas veces sólo se quejan cuando están exhaustos. Hablaremos de la luz azul, cómo nos afecta, y también qué podemos hacer para mejorar el dia a día de tu salud ocular.
¿Qué es la luz azul?
La luz azul se compone de las ondas electromagnéticas de menor longitud de onda del espectro visible. ¿Qué quiere decir este trabalenguas? Sin entrar en temas físicos demasiado técnicos, podemos decir que la luz del sol (también conocida como luz blanca) se compone de diferentes tipos de ondas electromagnéticas que podemos clasificar por su longitud de onda. Entre ellas están todas las visibles (desde las ondas rojas, con mayor longitud de onda y menor energía, hasta las azules, más cortas y más energéticas, pasando por el naranja, amarillo, verde, etc) y las no visibles como las infrarrojas, ultravioletas, microondas, etc.
¿Por qué es la luz azul especial para que hablemos de ella?
Todos los tipos de ondas del espectro tienen sus características, algunas de ellas son beneficiosas para nosotros pero otras pueden resultas nocivas. En general podemos afirmas que como en casi todo, lo poco gusta y lo mucho cansa, es decir, un poquito es beneficioso pero mucho puede perjudicar. Por ejemplo, la luz ultravioleta nos pone morenos y nos ayuda a sintetizar la vitamina D, pero si nos exponemos mucho nos puede provocar quemaduras o incluso cáncer en la piel.
En cuanto a los rayos azules, que son los rayos de alta energía como ya hemos comentado anteriormente, podemos citar distintas características:
BENEFICIOS DE LA LUZ AZUL (EXPOSICIONES CORTAS)
- Eleva el estado de ánimo: cuando estamos expuestos a menos luz solar, como en invierno, es más frecuente que nos sintamos decaídos, sin ganas de hacer cosas, y este estado de ánimo cambia en verano, cuando la cantidad de luz es mayor.
- Es clave para poder percibir correctamente los colores y mejora la agudeza visual: Si bloqueásemos toda la luz azul que percibimos los colores de los objetos que nos rodean quedarían alterados, y no captaríamos igual de bien sus diferencias.
- Ayuda a la memoria y a la función cognitiva: la luz azul te mantiene despierto y "alerta"
- Ayuda a regular el ritmo circadiano de sueño-vigilia: la luz azul es la que informa a nuestro cerebro que es de día, y por lo tanto que no es necesario seguir durmiendo.
PERJUICIOS DE LA LUZ AZUL (EXPOSICIONES LARGAS O DEMASIADO INTENSAS)
- Puede incrementar el riesgo de degeneración macular: la luz azul daña las células de la retina que son sensibles a la luz
- Aumenta la fatiga ocular: este tipo de ondas de alta energía tienen más dispersión que otras ondas de luz visible y por esto es más dificil enfocarla, por lo que nuestros ojos deben trabajar más y esto provoca su fatiga.
- Puede provocar insomnio: en realidad según se mire esto puede ser un beneficio o un inconveniente de la exposición a la luz azul. Como hemos comentado en los beneficios, la luz azul regula el ritmo de sueño-vigilia. Cuando nuestra retina percibe luz azul emite un mensaje al cerebro para que este nos mantenga despiertos. El problema viene cuando estamos recibiendo luz azul por la noche (si usamos pantallas antes de dormir) ya que nuestro cerebro interpreta que no es hora de dormir, y cuando nos vamos a la cama "no hay quien pegue el ojo"
FILTROS DE LUZ AZUL Y GAFAS PROTECTORAS
Todos los que utilizamos pantallas a menudo (smartphones, tablets, ordenadores o televisión) estamos más expuestos a la luz azul de lo que deberíamos. Una buena manera de poder seguir usando estos cacharritos sin que nos dañe la visión ni los ritmos biológicos es utilizar filtros para la luz azul.
Las gafas con filtro de luz azul son un tipo de gafas cuya lente está tintada ligeramente de amarillo. Cuando te las pones no te alteran la visión normal, no afecta al color con que ves las cosas, pero ayudas a que tus ojos reciban muchas menos de estas ondas. Estas gafas se venden sin prescripción y hay de varios tipos:
- Gafas con el filtro de luz azul (sirven incluso si se llevan lentes de contacto)
- Gafas con filtro de luz azul y de aumentos (para leer de cerca)
- Gafas con filtro de luz azul y correctoras de miopia, astigmatismo o hipermetropía (las tienes que pedir en una óptica)
¡Gracias por leernos!